Por eso yo solo quiero la playa y el mar.. [Paul]

Seguia rompiendome la cabeza pensando en un regalo para mi lobo.
¿seran mas complicados por ser lobos? o cuenta como chicos normales?
Me puse de pie, la roca estaba demasiado húmeda. Me limpie el pantalón y comencé a caminar en la arena, dejando pequeñas huellas en la arena.

Salté atleticamente una de las altas piedras que estaban en mi camino. Aún me quedaba algo de tiempo, Sabía que Rachel me esperaría. Apuré el paso y detras de un banco de arena la ví de espaldas. En silencio me aproximé, deseaba sorprenderla. Cuando la tuve cerca, le cubrí los ojos con mis manos, suavemente.
- ¿Hace mucho que me esperas? - Pregunté apareciendome delante con una sonrisa en mi rostro. - No quería hacerte esperar mucho tiempo -

Estaba por irme a buscarlo a otro lado, cuando unas cálidas manos se hicieron lugar en mi cara. Las reconocería ante todas las manos de la manada, era mi lobito.
-No, en realidad no..- mentí con una sonrisa.- que tal tu día?- lo tome de la mano y comencé a caminar otra vez.

- Todo bien - Respondí tranquilo. - Ninguna novedad de nada -
Acepté su mano y caminé en silencio por la playa. El mar tan cerca, la arena en mis pies, el lejano ruido de las aves, todo aquello me relajaba de momento. Pese a ser extremadamente volatil con la mayoría de las cosas, aún había algo que me relajaba.
- ¿Que hay del tuyo? -

No podia relajarme, no estando con el. Simulaba estar tranquila pero por dentro era una bola de nervios. Con la mano libre me acomode unos mechones que el viento habia mareado.
-Genial..-dije sonriendo, pero mirando al piso. Buscando un regalo para ti.. No tenia en mente que lo sepa. No aún.- has visto a mi hermano?-
ese niño celoso.. pobre Jake, no imagino como estaría si fuéramos algo mas que amigos. Contuve la risa por mi idea

- Jake... - repetí en voz baja recordando todas mis discusiones pasadas con el. El tiempo transcurría y seguíamos comportandonos como en aquel entonces. - No mas que un simple saludo. Todo está deteriorado con el. -
Bajé la cabeza y contuve mi ira. Jacob era tan imbécil cuando se trataba de Bella o su imprimacion. Podía comprender que eso era algo dificil de controlar, yo estaba imprimado en Rachel y ella no lo sabía.
Relajé mis musculos con aquel paisaje.
- Lamento que mi relacion con el no fuera la que tu esperaras. - dije algo melancólico -

Lo mire, y no me gusto nada como lo vi. No me gustaba ver ese brillo de tristeza en sus lindos ojos marrones.
-Descuida..-dije e hice una pausa. Negué con la cabeza resignada.- es mi culpa, lo siento.
Era absolutamente mi culpa y él era el que se disculpaba. Eso no estaba bien, todo se había arruinado cuando había vuelto. La amistad que los unia se debilitaba cada vez más.
-Si yo no hubiera regresado.. perdóname-di una pequeña patada a una roca diminuta que había en mi camino. Luego apoye mi cabeza en su brazo.

Tras sentir su cabeza en mi brazo me detuve y la abrazé en silencio.
-Sabes que tu regreso es lo mejor que me pudo haber pasado- comenté sobre su cabello -Nada ni nadie sería capaz de alejarme de ti. Daría todo por tu bienestar.-
Acaricié su mejilla con mi mano, clavando mis ojos en los suyos.
- No puedes culparte por nada. Y si buscas algo de que culparte, que sea el hecho de no poder estar sin pensar en ti - dije suavemente cerca de su oido.

Me acurruqué en sus brazos y lo abrace también.
Me sonroje demasiado por lo que había escuchado y agradecí el hecho de que me estuviera viendo a la cara. Como si fuera uno de esos chupa sangres y hubiese leído mi mente me miro a los ojos. Me costaba mantenerme mirándolo. Baje la vista y sonreí de costado. Sentía la sangre quemando mis mejillas. Lo mire a los ojos, brillaban de una manera especial, diferente a hacia unos instantes al hablar de Jake, y me encantaba.
Escondí mi cara en su pecho.

Sentí una leve magia en aquel momento y contuve el silencio, ahorrando palabras innecesarias. En silencio tambien se disfrutaba la compañía.
Me senté en la arena intentando mantener a ella acurrucada en mi. Casi podía sentir la necesidad de proteccion que yo, al imprimarme, le brindaba. ¿Y el resto? al demonio con el resto. Rachel era todo lo que necesitaba, aquella persona que solo me interesaba. La abracé aún mas.
- Te ves muy linda - dije en voz baja con una suave risa.

Me sente en la arena junto a él, y seguí abrazándolo. No me venían nada mal los 40° centígrados que debería estar teniendo Paul, era una estufa asegurada. Y mucho mas que una estufa para mi. En el ultimo tiempo, había ido tomándole un cariño casi inexplicable. Era demasiado para mi, me era imposible no querer estar todo el día con el. En parte aquello me hacia sentir tonta.

Sonreí por sus palabras. Y lo mire.
-bla bla bla, siempre dices lo mismo. No te creo- le dedique una media sonrisa- tú eres el lindo aquí..- sabia que así daba comienzo a un juego que terminaría después de un laargo rato.

Sonreí alegre ante su respuesta. Algo nervioso, hablé
- ¿porqué lo dices? Tu eres lo más bello que he visto. -
Levanté la cabeza y perdí la vista en el amplio cielo. Amaba realmente tener a Rachel tan cerca mio, podía sentirla mas que una verdadera amiga. A decir verdad, sospechaba que no supiera de mis sentimientos hacia ella.

Contemple su sonrisa. Era una de las cosas que mas me gustaba de él. Sus ojos, su sonrisa, lo cálido que era y como me trataba. Con él me sentía protegida, y querida, algo raro en mí.
-lo digo porque es cierto- le saque la lengua burlona, como los niños hacen. Aun acurrucada en el perdí mi vista en el agua. Me encantaba ver como el agua ganaba lugar a la tierra, pero luego se retiraba dejando solo una huella de su pasar. Eso era lo que no me gustaba de la vida, el parecido que tenia con la escena.

Me quité la remera y las zapatillas deportivas y las dejé a un lado.
- No estas muy formal que digamos. ¿Te gustaría ir a remojarte conmigo? -
pregunté levantandome y tomandola de las manos. -

Lo mire extrañada, mientras intentaba no mirar mientras se quitaba la remera. Ganas no me faltaban, pero no quedaba bien.
-Claro.. creo que sera divertido- Me sostuve de sus manos y me puse de pie. No era buena en el agua, pero tenia en claro que los perros sabían nadar, a ser sincera la única forma en la que me defendida en el agua era con el "estilo perrito", por lo que no me preocupe demasiado. Me quite mis zapatillas y las deje a un costado- te juego una carrera..- lo rete, luego de haber empezado a correr.

Tras oír su desafío comencé a trotar, intentando mantener una distancia para que ganara. Me encantaba su sonrisa y sacrificaría mi victoria por ver aquel gesto denuevo.
Cuando llegué al agua la tomé de la cintura. No me era dificil ver que le resultaba algo complicado nadar con facilidad.
- Agarrate de mi si lo necesitas - comenté besando su frente.

Me dejo ganar, eso estaba mas que claro. De todas formas disfrute de la victoria como si fuera real.
Entré algo temerosa al agua. Estaba fría.. Puajj. Sentí sus manos en mi cintura y eso me tranquilizo. Primero porque la estufa era a prueba de agua y segundo porque no me hundiría. Acto seguido: mariposas en la panza. Era linda la sensación pero no pude evitar sonreír tímidamente cuando beso mi frente.
En ese momento vino a mi mente un recuerdo. El primer recuerdo que tenia suyo y no pude evitar sonreir.
-Vino a mi mente un recuerdo..

Estaba ayudandola a nadar cuando mencionó eso.
- ¿un recuerdo? - pregunté asombrado.
No podía dar con exactitud cual era aquel recuerdo que estaba cruzando por su mente, pero quizas podía ser alguno en el que estuviese yo.
- ¿A que recuerdo te refieres? - pregunté sin soltarla

Su respuesta me desanimo, yo esperaba que él tambien hubiera tenido el mismo recuerdo. Tal vez, ese era mi problema, esperar cosas de la gente. Siempre me desilusionaba por eso, espera cosas que simplemente eran imposibles.
Ese es el porque nunca le diré nada de lo que realmente siento, es toda imaginación mia.
Me guarde mis pensamientos y le conté.
-Aquí fue el lugar en el que te conocí, recuerdas?- Jugué con mis manos en el agua.

Cerré los ojos fuertemente y maldije bajo el agua. ¿Como podía ser tan imbécil para olvidar aquel recuerdo tan bello? No podía retroceder el tiempo, ni mucho menos hacer caso omiso al dejo de tristeza que inundó su rostro. Me sentía culpable, completamente mal.
- Lo siento! No se como fuí capaz de olvidar aquel mágico dia - Contesté algo ruborizado. - Desde aquél dia no existe nada mas bello y necesario para mi que tu existencia.-
Mantuve mi rostro alejado del de ella unos minutos. Sabía muy bien que imprimarme en alguien era cuidarlo a cualquier precio, y no podía por nada del mundo acercarme mucho mas, por mas que lo desease con mi alma.

Oí como se disculpaba y no pude evitar sentirme aun mas tonta. Le dedique una sonrisa de costado.
-ya, Paul, no debes disculparte, que mas da? es solo un momento del pasado, es natural que lo olvidaras..-lo miré a los ojos, no me gustaba la cara que tenia.- vamos..!-dije con la mejor cara que podía poner. Lleve mi mano a su cara y lo obligue a mirarme- quiero ver una sonrisa..-hice una sonrisa plástica con mi rostro para que el la imitara- así, mira no es tan difícil.-

forcé mis labios y demás musculos faciales para transformar mi preocupación en una sonrisa.
- Como tu digas - expresé en un suspiro. No olvidaba el accidente de Sam la vez que se había convertido, y no quería lastimar a Rachel.
-Será un momento del pasado - dije - Pero el mejor que he tenido.

Podía ver como le costaba sonreír. Ni siquiera para eso servia, ni una sonrisa podía sacarle. Suspire y clave mis ojos en el cielo, mientras seguía sujetándome de el.
"tan cerca, pero a la vez tan lejos" que frase mas típica, pero no por eso dejaba de ser real.
Sonreí, aun con la cabeza para atrás mirando el cielo, al escuchar su ultima frase.
-no te esfuerces.. - hice una pause. lo mire y sonreí de costado- vuelvo a repetir que no se te da bien improvisar-

-Sabes que no puedo - Besé su frente y pregunté - ¿Que deseas hacer? La idea de la playa fue mia, y la de entrar al agua también. Pide algo, lo haré -
Sonreí desafiante.
- Haré lo que quieras, menos volverme lobo denuevo -